Antropología de Chesterton, 5: Incluir a todos los hombres, también a los ‘respetables’

Seguimos comentando los seis puntos de Por qué soy católico, que constituyen una visión de la antropología de Chesterton. Hoy vamos con la 5ª frase. Las anteriores pueden verse aquí (pasión por la verdad, la igualdad humana, la liberación de ser hijo del tiempo, la firmeza en la posesión de la verdad):

5. Es el único cristianismo que verdaderamente incluye a todo tipo de hombre, incluso al hombre respetable.

Imagen libre de 123rf.com

En el texto de hoy, Chesterton lanza cuchillos a los árboles, a imitación de los personajes de Stevenson. Imagen libre de 123rf.com

A la mayoría de las personas nos gusta pensar que estamos en lo correcto –al menos en lo más importante-, que nuestros criterios son los sanos y por tanto –aun a pesar de nuestras limitaciones y defectos- constituimos una base sobre la que la sociedad puede constituirse y funcionar. Y puede que eso sea realmente así, pero el resultado es la tendencia considerarnos ‘bienpensantes’, es decir, ciudadanos respetables, cumplidores y responsables. Como se dice hoy, ‘buena gente’.

Chesterton ironizaba continuamente sobre esa gente ‘respetable’, especialmente sobre la que goza del reconocimiento social en base a riqueza, sabiduría, posición social o inteligencia: nadie –salvo el hombre corriente- quedaba libre de sus simpáticas ironías. Eran realmente ironías para hacernos pensar, porque de hecho tenía amigos entre todos los grupos sociales. En uno de sus más sensatos ensayos –Dos policías y una moraleja, en Enormes minucias, n.27, que esperamos publicar pronto en el CB- comienza con la historia de dos policías que intentan detenerlo mientras se entretiene lanzando un cuchillo a los árboles del bosque, esa técnica tan útil con la que se asesinan unos a otros en la novelas de Stevenson. Los policías interrogan a Chesterton, que lógicamente explica sus argumentos y se defiende, con escaso éxito… hasta que dice a los policías que se halla alojado en casa del magnate local. Y en ese momento la cosa cambia: Me dejaron marchar porque demostré que estaba invitado en casa de una familia conocida. La conclusión está penosamente clara: o bien no es una prueba de delito lanzar un cuchillo en un bosque solitario o por el contrario es una prueba de inocencia conocer a un hombre rico.

Chesterton reflexiona aplicando sus argumentos al mundo inglés –que era lo que mejor conocía y lógicamente más le interesaba, pero en seguida nos daremos cuenta de que pueden aplicarse a cualquier país- y critica el hábito de respetar a los caballeros. El esnobismo tiene, como la bebida, una especie de noble poesía. Y también una cualidad peculiar y diabólica que está muy extendida entre la gente amable que nos abre su corazón y sus casas. Ése es el gran vicio inglés y deberíamos temerlo más que a la viruela. Si un hombre desea oír lo peor y más malvado de Inglaterra resumido de manera informal, no lo encontrará en ningún obsceno juramento o discusión entre maleantes. […] El poder de la riqueza en su forma más vil aumenta en el mundo moderno. Un pueblo muy bueno y justo, sin esta tentación, tal vez podría no necesitar crear normas y sistemas para protegerse contra el poder de nuestros grandes financieros. Porque un pueblo muy justo les habría fusilado hace mucho tiempo, por mera buena fe.

Este ensayo está incluido en la selección Correr tras el propio sombrero (y otros ensayos), publicada por Acantilado, 2005, traducción de Miguel Temprano, pp.624-628, de donde se han tomado los fragmentos. El último bloque de artículos –al que pertenece éste- se llama ‘El culto a los ricos’, y ofrece un elenco de textos semejantes, donde avaros, filántropos, funcionarios, políticos y otros seres respetables por el estilo son ironizados de igual manera.

Y ahora viene la paradoja: la gente respeta a estas personas por lo que tienen, no por lo que son; Chesterton se ríe justificadamente de lo que son y de lo que tienen. Pero por fin, en la frase de hoy, encontramos a un Chesterton que se admira del Dios de los católicos que –a diferencia de los protestantes, tan preocupados la decencia y las apariencias- es capaz de entrar en el fondo del corazón de todos los hombres -también de los ‘respetables’- y concederles –si lo merecen- un puesto en el Reino de los cielos. Eso sí que es asombroso.

Anuncio publicitario

3 Respuestas a “Antropología de Chesterton, 5: Incluir a todos los hombres, también a los ‘respetables’

  1. Me parece una salida original para una situación difícil. No sé si caben otras alternativas a la cuestión de la respetabilidad, pero ésta desde luego, está lograda. Esta entrada se parece un tanto a la segunda dedicada a la antropología, dedicada a los superiores, y sirve para advertir que Chesterton tiene una finísima sensibilidad hacia el tema de la igualdad: a veces pensamos que la igualdad sería el patrimonio ideológico de la izquierda -como la libertad sería el de la derecha-, tal como planteó en su momento el gran Norberto Bobbio, con bastante razón. Pero el caso es que Chesterton no puede ver a todos aquellos no sólo que son superiores, sino que sienten superiores. Enhorabuena, gracias por compartir.

    • Creo que estás equivocado, amigo Socabit. GK puede perfectamente soportar a los superiores que son verdaderamente superiores, porque una cierta desigualdad es necesaria en la sociedad. Lo que Chesterton no soporta es la actitud de quienes se creen superiores porque tienen más inteligencia, dinero, posición social o poder que el resto, y que encima explotan en su propio beneficio, en vez de ponerlo al servicio de los demás, como hizo el propio Chesterton, que era muy superior a la mayoría pero que nunca se enorgulleció, pues era consciente de ser un don, un don que había que utilizar para abrir los ojos a la gente.

  2. Pingback: Antropología de Chesterton, y 6: Dignidad, voluntad y fe en el ser humano | Chestertonblog

Deja una respuesta

Introduce tus datos o haz clic en un icono para iniciar sesión:

Logo de WordPress.com

Estás comentando usando tu cuenta de WordPress.com. Salir /  Cambiar )

Foto de Facebook

Estás comentando usando tu cuenta de Facebook. Salir /  Cambiar )

Conectando a %s