Tras cuatro semanas de «misterio» os revelo hoy la autoría del ensayo que a modo de juego os propuse en la anterior entrada. Es por ello que quién no haya llegado a leérsela, debería empezar por ello antes de pulsar «sigue leyendo»…
En una de mis búsquedas de libros de Chesterton, me topé, en una librería de viejo con una recopilación de ensayos sobre el progreso y la evolución. Recoge buena cantidad de artículos de variados autores, sobre dicho tema, y como no podía ser menos alguno de Chesterton. Fue impreso en Argentina en 1955, recopilados y traducidos por Antonio García Birlan, que además escribe el prólogo, que fue el texto que os facilité como ejercicio de reflexión.
Leyéndome el prólogo vislumbré el sentimiento de melancolía, desencanto y desesperanza del autor acerca del progreso y, llevado por mi curiosidad intenté saber algo mas sobre él. Cual fue mi sorpresa al descubrir que el tal Antonio G, Birlan, había sido un traductor, escritor y periodista granadino nacido en 1891, en Pinos Puente, según unas fuentes, Fuente Vaqueros o incluso Valderrubio, dicen otras.
Parece ser que pudo incluso enseñar las primeras letras a Federico García Lorca. Militó desde joven en el movimiento anarquista ibérico y se traslado a Barcelona donde realizó tareas periodísticas y políticas, llegando a realizar tareas políticas en la Generalitat de Cataluña y dirigir la Vanguardia durante los años de la Guerra Civil. Al final de esta tuvo que exiliarse de España y se traslado a Paris donde colaboró en la corrección del diccionario enciclopédico Larousse y mas tarde emigró a Brasil, y finalmente, a Rosario, Argentina, donde permaneció hasta su regreso a España en 1983, u año antes de su fallecimiento.
Fué anarquista y humanista convencido, influenciado por pensadores como Nietzsche, Kieerkegaard, León Tolstoi y Miguel de Unamuno.

Es evidente que no pretendía que dierais con el autor de modo preciso, pero el carácter melancólico y pesimista de su pensamiento me llamó la atención y su ascendencia común al lugar de origen de nuestro Club Chesterton de Granada me resulto un vínculo curioso.
Vuestras respuestas han sido todas muy certeras incidiendo especialmente en la falta de fé y esperanza del autor.
Curiosamente el texto de Chesterton que incluye el libro pertenece a la obra «Lo que esta mal en el mundo» y algunas de las frases que contiene creo que son muy certeras al respecto:
“Nadie puede usar la palabra progreso si no tiene un credo definido y un férreo código moral.
Porque la misma palabra progreso indica una dirección; y en el mismo momento en que, por poco que sea, dudamos respecto a la dirección, pasamos a dudar en el mismo grado del progreso.”
«Progreso» debería querer decir que estamos cambiando continuamente el mundo para adecuarlo a nuestros ideales, en vez de estar cambiando continuamente de ideales.
Mi actitud hacia el progreso ha pasado del antagonismo al aburrimiento. Hace tiempo que he dejado de discutir con la gente que prefiere el jueves al miércoles simplemente porque es jueves.
Los hombres inventan nuevos ideales porque no se atreven a alcanzar los viejos ideales. Miran hacia delante con entusiasmo porque tienen miedo de mirar hacia atrás».
Gracias por vuestra colaboración.
Gracias David….era para nota
Me ha resultado muy interesante